jueves, 14 de agosto de 2008

Contingencia

Si no hubiera cruzado el paso de cebra con el semáforo en rojo no habría girado por esa calle justo en el momento en el que la señora se puso a gritar como una loca y el chico de las bermudas azules echó a correr con el bolso mientras el guarda jurado del banco de la esquina sacaba su arma reglamentaria, le daba el alto y disparaba al aire primero y, maldita puntería, al frente después, de modo que la segunda bala esquivó a los transeúntes, rebotó contra el buzón de correos y, sin que afectara a órganos vitales ni hubiera que lamentar mayores desgracias, fue a alojárseme de refilón en la pantorrilla.


-José Alberto García Avilés, del libro La maldad de las palomas-

4 comentarios:

supersalvajuan dijo...

Correos, siempre con retraso.

Dante dijo...

Correcto. Además que la culpa de todo la tiene el gobierno jejej.

g dijo...

la foto le va genial al cuento, da mucho que pensar... la bala se le metió en la pantorrilla por culpa del azar y con pasos de zebra interminables es como si el azar estuviera ininterrumpidamente acechándons. para mi la imagen completa el significado del cuento, incluso lo transforma, muy acertado D.

Dante dijo...

Muchas gracias Gisela por la observación, y gracias por tu opinión sobre la foto, ya que me costó mucho encontrar una que acabara de dotar de un significado más profundo al relato. Es la primera vez que alguien me agradece mi contribución en el mundo de las fotos jejeje.