EMPEZÓ A DARLE LA VUELTA al café con leche con la cucharita. El líquido llegaba al borde, llevado por la violenta acción del utensilio de aluminio. (El vaso era ordinario, el lugar barato, la cucharilla usada, pastosa de pasado). Se oía el ruido del metal contra el vidrio. Ris, ris, ris, ris. Y el café con leche dando vueltas y más vueltas, con un hoyo en su centro. Maelstrom. Yo estaba sentado enfrente. El café estaba lleno. El hombre seguía moviendo y removiendo, inmóvil, sonriente, mirándome. Algo se me levantaba de adentro. Le miré de tal manera que se creyó en la obligación de explicarse:
-Todavía no se ha deshecho el azúcar.
Para probármelo dio unos golpecitos en el fondo del vaso. Volvió en seguida con redoblada energía a menear metódicamente el brebaje. Vueltas y más vueltas, sin descanso, y el ruido de la cuchara en el borde del cristal. Ras, ras, ras. Seguido, seguido, seguido sin parar, eternamente. Vuelta y vuelta y vuelta y vuelta. Me miraba sonriendo. Entonces saqué la pistola y disparé.
-Todavía no se ha deshecho el azúcar.
Para probármelo dio unos golpecitos en el fondo del vaso. Volvió en seguida con redoblada energía a menear metódicamente el brebaje. Vueltas y más vueltas, sin descanso, y el ruido de la cuchara en el borde del cristal. Ras, ras, ras. Seguido, seguido, seguido sin parar, eternamente. Vuelta y vuelta y vuelta y vuelta. Me miraba sonriendo. Entonces saqué la pistola y disparé.
-Max Aub, del libro Crímenes ejemplares-
3 comentarios:
Olvídate del café. Y mejor no pensar cuánta gente habrá chupado esa cucharillas. Only beer and gintonics
jajajajaja.... sólo le falta decir... "y después de dispararle me bebí su café, ¡porque nadie, absolutamente nadie, debe irritar a con Chuck Norris!
la verdad es que este cuento me ha puesto nerviosa... sabes aquellas cosas que cuando las lees en un cuento que lo explica bien irritan más que en la realidad porque es como si se viera a través de un filtro enervante y además pusiera una lupa sobre esa irritación. Puede ser que alguno de nosotros nos hubiésemos encontrado en esa situación y no nos hubiésemos molestado en lo absoluto.
v v vvvvvvvv vvv vvvv vvv
e e e e e e e
s s sssss ssss s s ssss
o o o o o o o
s ssssssss ssss ssss ssss
-Supersalvajuan, qué bueno, es verdad lo de las cucharillas, tienes razón en que es mucho más higiénico y saludable la cerveza y el gintonic, y mira lo que te digo lo que mejor limpia es la absenta, mano de santo.
-Gisela, tienes razón ese final tampoco está mal, tal vez para cuando hagan la adaptación del cuento al cine.
La gracia del cuento estriba en recrearse en la enervante situación, de hecho es lo más importante y lo que más espacio ocupa, pues la muerte se ventila en apenas una frase. Puede ser que nos hayamos encontrado en esa situación pero este personaje ha sido el único valiente que lo ha hecho jejejeje.
V-E-SOS (mal dividido en sílabas)
Publicar un comentario